Cada habitación es un mundo.
Al establecer el estilo del interiorismo a implementar en cada habitación es importante establecer el objetivo funcional de cada habitación.
Lo ideal es que si un dormitorio es para descansar sea confortable, tranquilo y se decore con combinaciones de colores y formas que transmitan calma.
Así si también es el lugar donde se recrea el amor hay que pensar en complementar el lugar con elementos que motiven la relación entre las personas que lo ocupan, con motivos personalizados y colores cálidos que envuelvan los momentos íntimos.
Las cocinas pueden ser de diferentes estilos según el gusto de las personas, pero siempre se aconseja tener mobiliario que ayude a ordenar los instrumentos y alimentos.
Los baños y aseos deben decorarse al gusto de cada persona, siguiendo el instinto personal, sabremos qué material y elemento natural nos es más propicio, madera, metal, plástico y cerámica.
Las entradas de las casas se recomienda que sean sencillas pero hay quien quiere expresarse en plenitud con vistosos colores y detalles que llenan de luz.
Los salones y comedores igualmente pueden decorarse de forma original según la personalidad de cada persona, lo ideal es que sean confortables y cómodos, para que la vida vivida dentro sea próspera y plácida.